Categorias: Blog
¿Qué es un fideicomiso?
Es la figura judicial fundamental a la hora de proteger el patrimonio familiar constituido a lo largo de los años. Entre sus funciones principales están: restringir o limitar la venta de bienes, realizar inversiones específicas o asignar rentas en relación a una serie de requisitos determinados previamente.
Su ABC es: establecer la dirección del patrimonio para evitar posibles conflictos, asesorar en la toma de decisiones financieras y ejecutar la correcta administración de los bienes.
Este instrumento legal permite dar soluciones específicas y seguras mientras ocurre la transición generacional mediante un esquema de sucesión óptimo.
Dos ventajas del fideicomiso familiar
Además de lo mencionado con anterioridad, existen algunos beneficios jurídicos que conviene resaltar. Por un lado, su ventaja por encima de la creación de una sociedad familiar que implicaría la designación de una persona titular para la toma de decisiones y la adquisición de obligaciones (que, muchas veces, puede no resultar la más idónea en la materia).
Por el otro, la flexibilidad de esta herramienta, que se traduce en su aplicación a familias con una única actividad y patrimonio autónomo, y a otras con situaciones más complejas que incluyen diversidad de actividades de inversión, inmuebles y carteras de acciones.
Dos escenarios posibles cuando fallece el jefe de familia
Un caso puede darse cuando esta persona mediante el fideicomiso haya planificado la sucesión en vida sumado a un conjunto de reglas determinadas para cumplirse luego de su fallecimiento. Otra situación ocurre cuando la persona ya cedió los derechos fiduciarios a sus hijos y/o cónyuge; esto significa que si bien en vida ella era la encargada de tomar las decisiones, a partir de su muerte se creará un nuevo mecanismo de gobierno familiar, cuya estructura estará definida por el ordenamiento dispuesto en el fideicomiso.
Como siempre ocurre, cada caso es particular. Analizar las necesidades específicas de cada familia para poder estructurar un fideicomiso que resulte en la herramienta adecuada, es primordial. La planificación patrimonial y sucesoria mediante este recurso legal, más allá de establecer reglas de gobierno familiar y ordenamiento, brinda tranquilidad a sus miembros. Por eso, resulta necesario contar con un equipo de profesionales con la capacidad y el oficio para velar por la protección de los bienes familiares.